– Mamá, te quiero aunque tu corazón sea de piedra.
Nota: Es probable que junto a la escultura pusiera «no tocar», pero juro que tuve cuidado y que no usé flash. Palabrita.
– Mamá, te quiero aunque tu corazón sea de piedra.
Nota: Es probable que junto a la escultura pusiera «no tocar», pero juro que tuve cuidado y que no usé flash. Palabrita.
Y q es lo q le hace pensar al Peque Gremlin q tu corazón es de piedra??? haztelo mirar, nena!
Tengo que reír….DEMASIÉ jajajaja eyteconozco y eso de «ternurita a mi manera» jajajaja no puedo más jajajaja 😛 Muy tú 😛 un besote desmadroso
El que te vea «desde fuera» pensará que estás fatal. Los que te conocemos, como ya lo sabemos, no le damos importancia!
Un beso.
Siempre logras que sonría!! No tengo tiempo de leer pero tus viñetas no pierdo ni una. Sencillamente: ¡ME ENCANTAN!
Hola!, misión cumplida!! he leído tu ma-ra-vi-llo-so blog de cabo a rabo y no puedo más que decirte que eres genial, fan incondicional desde ahora!!! espectacular la viñeta…
En todo caso, tú no la tocaste, la tocó el Gremlin 😉 Es muuuuy tierna!
Qué ternurita… Jajaja. Os saltasteis las normas por una buena causa, no sufráis. Besotes!!!
Si su corazón para el Gremlin es de piedra… No sé qué sentirá Tamagochi!!
De piedra blanda, esa que parece dura, pero cuando la aprietas, se deshace…
De todas maneras, te va a querer igual…
Besitos
Seguro que una foto, y un ligero roce no le hizo nada a la escultura. Corazón de piedra? De la que se rompe en mil pedazos como el azúcar, no? Si las madres por mucha fachada son unas blandas! (en el término bueno de la palabra)
¡Bah! ¿pero tu estás viendo todo el solazo que le da a la escultura por un lado? Como si le metes toda la iluminación de la boda de la hija de Aznar y te montas tu a horcajadas encima, al conservador de ese sitio se la pela, no te sientas culpable.
Acabas de dejarme infinitamente más tranquila 😛 La verdad es que no había cartelito de «no tocar», era por hacerme la macarra, jajaja